Curación del Mate :
El procedimiento es el siguiente: se lava muy bien el interior de la calabaza nueva con agua caliente, quitándole las cutículas adheridas a las paredes. Una vez escurrido se llena con una cebadura ya usada –, luego se le agrega un poco de agua tibia para que la yerba no se seque muy rápidamente.
Al día siguiente se vacía y vuelve a repetirse la operación, aunque esta vez sin lavar la calabaza. A partir del día siguiente, el mate ya está absolutamente curado y puede comenzar a utilizarse.
Todos los demás tipos de mates (aluminio u otro metal, plástico, vidrio, loza u otros) son incurables. Con un simple lavado ya están listos para la primera cebada.